En relación al post de los envíos de peces en Brasil
http://www.sekweb.org/aphanius/index.php?action=post;topic=3873.0;last_msg=24616comentar que me parece una hipocresía como la copa de un pino poner como argumento que el transporte en cajas ponga en peligro el bienestar de los peces e incluso el vendedor otorgue una garantía en la que cubre la eventualidad de la muerte del animal. Por las carreteras de todos los países del mundo, incluido Brasil, circulan todos los días decenas de camiones llenos de jaulas llenas de gallinas hasta los topes, apiñadas, hacinadas, pestilentes, muchas moribundas, que viajan desde los ponederos hasta los mataderos; muchas de ellas muriendo antes de subir al camión, otras tantas muriendo en el camión, y el resto muriendo sí o sí en el matadero. Circulan a la vista, sin que la mayoría de los ciudadanos se sonrojen. Esto no está mal visto (al menos no está penado), ya que la gallina es un animal nacido para producir, vivir una vida miserable y morir, y un pez de colores es un animal nacido para vivir protegido en su ambiente natural y representar la riqueza biológica natural de un país. La gallina nos da huevos, el pez nos da caché. Quizá se trate sólo de eso, de que representa riqueza de fachada.
Con frecuencia pienso que, dentro de 100 años, echarán la vista atrás y contemplarán con pesadumbre la categorización tan indigna que hacemos de los seres que comparten con nosotros este planeta.
Menos mal que según parece no existe la justicia universal, porque si no las íbamos a pasar canutas.
Saludos...